viernes, 18 de abril de 2008

Memoria, factor desconocido

Si bien el aprendizaje es un proceso por el cual los organismos modifican su conducta para adaptarse a las condiciones cambiantes del medio el cual los rodea, existe sin duda aquel receptor o retenedor de todo lo que aprendemos, llamado memoria. El poder adaptarse a las condiciones cambiantes, resulta indispensablemente el hecho de dividir la memoria en dos, obteniendo una memoria a corto plazo y a largo plazo, que si bien cumplen una misma función, tienen distintos niveles de retención de lo aprendido, medido en tiempo.

¿El abusar de la memoria, es bueno para nosotros? Frente a un sinnúmero de acciones que como seres humano realizamos por costumbre, existe el gran dilema de saber realmente si benefician nuestra capacidad de aprendizaje y memoria, un ejemplo clave corresponde el aprender los números de teléfonos, si bien muchos dicen que es bueno para ejercitar la memoria, otros refutan diciendo que el guardar cosas tan simples como esas, es una gran perdida de espacio de que podría ser ocupado en cosas talvez mas importantes. Albert Einstein pensaba que el abuso mental provocaba un desgaste energético tanto para la memoria como para el mismo cuerpo, es por ello que usaba la ropa de un mismo color para no tener esa perdida de energías al preguntarse día a día que ropa usaría, una anécdota que explica la grandiosa delicadeza de la función mental. “No guardes nunca en la cabeza aquello que te quepa en un bolsillo”.(Albert Einstein (1879-1955) Científico estadounidense de origen alemán).


Decimos que prácticamente sin memoria nosotros no podríamos vivir, y esto principalmente por las funciones cotidianas que son cumplidas por la memoria, inevitablemente somos seres carentes de las herramientas para poder usar al cien por ciento nuestro cerebro que es el patrón de todos nuestros actos, incluyendo el aprendizaje y la memoria, sin llegar mas lejos científicos han descubierto que de el cien por ciento que podemos usar de nuestra memoria, es solo usada el 15 por ciento, y esto principalmente por la falta de conocimiento a lo largo de muchos años de estudio. ¿Cuáles serían las consecuencia de un mayor logro de la utilización de la memoria?, según lo mencionado anteriormente podríamos concluir que si el aprendizaje está estrechamente ligado con la memoria, seríamos en un futuro seres intelectualmente mucho más hábiles, llenos de conocimiento y de gran retención de elemento de las condiciones del medio cambiante del cual estamos insertos.

“Cada uno tiene el máximo de memoria para lo que le interesa y el mínimo para lo que no le interesa” (Arthur Schopenhauer (1788-1860) Filósofo alemán). Muchas veces somos sujetos representativos para el resto de la gente, como aquel ser despreocupado de lo que nos comentan, o de cualquier otro motivo que nosotros no prestamos mayor atención. Esto nos permite distinguir con claridad que la memoria es un fiel esclavo de las órdenes que nosotros le dictamos, ésta no trabaja sin el consentimiento de uno, si bien el subconsciente puede cumplir muchas veces las órdenes sin que uno se las diga, es algo que no se encuentra con gran claridad dentro de las retenciones de la memoria. El estar conciente de lo que nosotros queremos grabar dentro de cada uno, estimula a la memoria a que permanezca durante un determinado plazo retenido, siempre cuando exista la intención o el mismo interés de poseer lo que queremos. Mente, cerebro y memoria, ¿Factores desconocidos?, nos queda mucho por conocer.